El mítico Renault 4L cumple 60 años desde su nacimiento, un modelo que conquistó el corazón de los españoles por una combinación de factores como el precio, la robustez y durabilidad, el tamaño o la ergonomía, haciendo que se convirtiera en uno de los coches más icónicos de nuestro país, alcanzando cifras de ventas superiores a las 800.000 unidades.

Renault ha querido celebrar su 60 aniversario, haciendo un Renault 4L eléctrico que, además, estará disponible como coche compartido en Madrid.

La compañía Zity by Mobilize, perteneciente al grupo Renault, utilizará el Renault 4L para su plataforma de coche compartido (carsharing), que circulará por las calles de Madrid en noviembre para la grabación de un spot publicitario. No parece que vaya a poder utilizarse de verdad, algo que, sin duda, sería una curiosa oportunidad de experimentar la movilidad eléctrica del presente y el futuro con las peculiaridades de un coche clásico del pasado.

El Renault 4L de Zity incorpora un propulsor eléctrico, que sustituye en el vano motor al motor de gasolina original. Desde Renault no han publicado más datos a nivel técnico de este Renault 4L eléctrico. El modelo original, montaba unos pequeños motores de gasolina que, dependiendo de la versión, erogaban una cilindrada entre 0.7 y 0.8 litros y una potencia máxima entre 22 y 30 CV.

¿Quién es Zity?

Zity es una empresa de movilidad compartida de Ferrovial y Renault, presente en Madrid y París. Cuenta con una flota de 1.300 vehículos, todos eléctricos, y con más de 450.000 usuarios.

Como empresa de carsharing contribuye a mejorar la calidad de las ciudades, gracias al uso compartido y a la utilización de vehículos eléctricos. Como ejemplo, en Madrid, su flota evita anualmente más de 2.500 toneladas de emisiones a la atmósfera. Es decir, el equivalente al consumo de energía de casi 300 hogares españoles al año.

Además, ayuda a reducir la contaminación acústica y a mejorar la fluidez del tráfico. Según los datos recopilados en el servicio de Zity, cada vehículo de carsharing es utilizado entre 8 y 10 veces más que un vehículo particular.

Asimismo, según la última encuesta realizada por la compañía, el 85% de sus usuarios seguirá utilizando el servicio a medio plazo. En consecuencia, seguirá produciendo los mismos beneficios, sobre todo por lo que respecta a la emisión a la atmósfera de gran cantidad de gases contaminantes.

El carsharing de Zity es una solución de movilidad sostenible. Su modelo se basa en la economía colaborativa, la tecnología y la reducción del impacto medioambiental.

Ciudades en pleno cambio

Madrid, según recuerdan desde Zity, se ha convertido en la ciudad europea con un mayor índice de mortalidad asociado a la polución causada por el tráfico rodado, pues esa es la conclusión del ranking de mortalidad asociada a la contaminación atmosférica por dióxido de nitrógeno que publicó ISGlobal a principios de este año.

Por ello, el gran reto actual de las grandes urbes, cada vez más pobladas, es garantizar la movilidad al mismo tiempo que reducen la contaminación. Para lograr sus objetivos, a lo largo de todo el mundo se están tomando diferentes medidas, desde las zonas de exclusión de tráfico rodado dependiendo de las emisiones de los vehículos, hasta la peatonalización de áreas residenciales, los peajes urbanos, la electrificación de las flotas de transporte público o las soluciones de Inteligencia Artificial que permiten prever la demanda de movilidad y optimizar los recursos.