AEDIVE es la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico en España que nació en abril de 2010 y es “una agrupación de empresas innovadoras que aglutina a toda la cadena de valor del vehículo eléctrico”.

Según proclaman, promueven “la gestión, representación, defensa y coordinación de los intereses comunes de sus miembros, promoviendo y contribuyendo al fomento de la competitividad de los sectores relacionados con toda la cadena de valor de la Movilidad Eléctrica, para poder afrontar aquellos retos y oportunidades que se deriven de la implantación del vehículo eléctrico, sus infraestructuras de recarga y servicios asociados, generando sinergias entre sus miembros asociados, acelerando el desarrollo de negocios y promoviendo la competitividad entre las empresas y mediante partenariados público-privados, con el fin de impulsar el desarrollo del mercado, creando un marco sólido y estable para la e-Movilidad”, tal y como se refleja en los Estatutos de AEDIVE.

Pues bien, entre sus actividades, acaban de publicar las “Propuestas para una hoja de ruta de la movilidad eléctrica” que dicta hasta casi una veintena de propuestas a corto, medio y largo plazo en España, ya que en nuestro país “los incentivos para el vehículo eléctrico son más complejos que en otros países...” según expresó el director de esta asociación, Arturo Pérez de Lucía.

El documento de AEDIVE coincide precisamente con un año, el 2023, en el que más vehículos eléctricos se han vendido en España (70.000 vehículos) y que duplican con creces esa cifra si se incluyen los electrificados (híbridos). De igual manera, también aumentaron los puntos de recarga en todo el territorio. Y todo ello con visos de que 2024 sea igual o más bueno todavía en esta senda del crecimiento hacia la movilidad sostenible en todos sus aspectos.

Por ello, nos hacemos eco literal de casi esa veintena de puntos o propuestas, muy interesantes y elaboradas de AEDIVE en esta hoja de ruta que, desde luego, intenta promocionar, desarrollar y mejorar todo lo relativo a los vehículos eléctricos y ayude a conseguir los planes para que en 2030 se cumplan las previsiones del plan nacional de energía que fijaba en 5,5 millones el número de vehículos electrificados en España. Para mayor información de esta hoja de AEDIVE, ya que el documento es muy extenso y tiene además mucha información gráfica, puede consultarse en www.aedive.es.

MEDIDAS A CORTO PLAZO:

1. Aprobar un nuevo Plan MOVES simplificado y evolucionado que incluya un adelanto de las ayudas a los consumidores, así como elementos que aumenten su importe para colectivos de menor renta. También creemos necesario automatizar y agilizar la tramitación y crear nuevas líneas de ayuda.

2. Agilizar la tramitación de la infraestructura de recarga, para garantizar que su desarrollo continúe acompasado con el proceso de electrificación del parque de vehículos.

3. Publicar información actualizada de puntos de recarga públicos, tanto de su número y potencia, como de su tiempo de uso con el fin de comprobar si el número de puntos instalados continúa siendo suficiente para abastecer el parque.

4. Impulsar un Foro por la Sostenibilidad del Transporte, que reúna de manera periódica al Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico con los principales representantes de la cadena de valor de la movilidad eléctrica.

MEDIDAS A CORTO PLAZO:

1. Transitar a un incentivo impositivo permanente y tangible, estableciendo un sistema de deducciones fiscales que traslade una señal clara al potencial comprador. Un IVA reducido o una deducción en el mismo sería la mejor alternativa, ya que se aplicaría directamente sobre el precio de compra y podría complementarse con el MOVES. 

2. Eliminar la tarifa del Impuesto Actividades Económicas a los puntos de recarga tanto a nivel municipal como nacional.

3. Modificar el impuesto de matriculación con nuevos tramos impositivos acordes al actual sistema de homologación (WLTP).

4. Establecer objetivos específicos de despliegue de infraestructura de recarga, con carácter anual y desglosados por tipo de instalación según su potencia, que trasladen visión y permitan un seguimiento de su ritmo de instalación.

5. Impulsar la electrificación de la flota de taxis, acompañado de un mayor despliegue de infraestructura pública de recarga rápida.

6. Desarrollar un plan de electrificación de las infraestructuras logísticas, mediante la implementación de puntos de recarga eléctrica de alta capacidad en aeropuertos, estaciones de tren, bus, metro, etc.

7. Publicar una guía de mejores prácticas para movilidad compartida a nivel local vinculándola con otras medidas como bonificaciones a empresas de MaaS, o un plan de movilidad rural con incentivos específicos.

8. Desplegar un plan de formación en movilidad eléctrica que garantice la disponibilidad de personal cualificado suficiente e incremente la colaboración público-privada para la formación y divulgación en movilidad eléctrica.

MEDIDAS A LARGO PLAZO:

1. Aprobar una Ley de Movilidad Sostenible que contemple incentivos para la electrificación, objetivos vinculantes de instalación de infraestructura de recarga pública, un calendario gradual y realista de implantación de Zonas de Bajas Emisiones y la revisión del actual etiquetado ambiental de la DGT, entre otros puntos.

2. Desplegar un plan de movilidad eléctrica para el sector empresarial que incentive la electrificación de la flota empresarial mediante objetivos progresivos anuales y planes para empleados.

3. Aprobar un plan de infraestructura de recarga de vehículos pesados (PIRVEP) en las principales rutas consistente con los objetivos de la AFIR, así como un régimen económico que dé certidumbre a los gestores de infraestructura sobre la recuperación de sus inversiones y permita fijar un precio de carga competitivo (0,20 €/kWh).

4. Impulsar la movilidad eléctrica en el transporte off-highway, iniciando un proceso de escucha con el sector con el objetivo de plantear propuestas que garanticen la descarbonización de la maquinaria industrial y agrícola.

5. Promover la capacitación de talleres para adaptar las zonas y herramientas de reparación y mantenimiento a los nuevos modelos eléctricos.